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¿Qué ver en Brujas?

Te contamos cuales son los lugares que no debes perderte al visitar la ciudad de Brujas en Bélgica. Un lugar que te sorprenderá.


Brujas es una ciudad que parece sacada de un cuento. En cierto modo es verdad, debido a la historia que vivió, varias de sus construcciones quedaron congeladas en el tiempo. Hoy en día, sus ciudadanos saben que ahí radica su encanto y lo preservan para beneplácito de todos. En este artículo, vamos a hacer un recorrido para darnos una idea de ¿qué ver en Brujas?

Brujas es la capital de la provincia de Flandes Occidental, situada a 90km de la capital Bruselas, cuenta con una población de aproximadamente 117,000 habitantes.

¿Por qué se llama Brujas?

El nombre Brujas, al menos en español, nos hace pensar en las brujas, pero el nombre de esta ciudad no tiene nada que ver con estas damas tenebrosas. Al parecer, el nombre proviene de la antigua palabra escandinava “Brygga” relacionado con puerto o lugar de amarre. Para referencia en idioma neerlandés, que es muy cercano al flamenco, “brug” significa puente. Hay que tener en cuenta que el nombre oficial de la ciudad en flamenco es Brugge, que significa Puentes en plural debido a la gran cantidad de los mismos que existen en la ciudad.



¿Qué ver se puede visitar en Brujas?

La Plaza Mayor

La Markt o Plaza Mayor, es uno de los principales puntos de encuentro en el centro de Brujas. El edificio dominante que podemos ver es el campanario, el cual puede visitarse y subir unos 366 escalones para poder ver Brujas desde lo alto. Por desgracia, no pudimos visitarlo debido a la situación del momento. En la mitad de la plaza, se encuentran dos estatuas, se trata de Jan Breydel y Pieter de Coninck, héroes populares de la ciudad.

Ayuntamiento

El Stadhuis, es el lugar desde donde se gobierna la ciudad ya hace 600 años. Lo más importante que hay que visitar aquí es la sala gótica, aunque también hay que detenerse a admirar el edificio por fuera.

En la sala, podemos ver murales sobre la historia de Brujas, la visita incluye una audioguía que nos hace la visita mucho más rica ya que nos va explicando las pinturas que hay ahí, que no son pocas. Es uno de esos lugares que apenas ingresar nos generan el efecto WOW.

Horarios de visita: todos los días de 9:30AM a 5:00PM
Precio:
6 euros (visita conjunta con la sala del Ayuntamiento)

Franconato de Brujas

Ubicado en uno de los edificios del Ayuntamiento, aquí se ubican hoy en día los archivos de la ciudad. La sala que se visita es la vistosa habitación donde se controlaba el Franconato de Brujas, después pasó a ser sede de los Tribunales de Justicia, al entrar podemos ver un enorme cuadro que recreaba una escena de esos tiempos.

En la chimenea, que data de 1528, podemos admirar un homenaje a Carlos I, el cual como es de esperarse se ve al centro de las figuras de madera.

La sala es pequeña, por lo que es mejor si la visitamos cuando hay poca afluencia. Además de que es una sala muy obscura. Este es uno de esos sitios en Brujas que no hay que perderse.

Horarios de visita: todos los días de 9:30AM a 5:00PM
Precio:
6 euros (visita conjunta con la sala del Ayuntamiento)

Basílica de la Santa Sangre

Esta iglesia, que se convirtió en basílica en 1923, cuenta con dos capillas una inferior y otra superior. En la capilla inferior se puede ver el estilo románico que se usaba en la zona costera. Por otro lado, en la capilla superior el estilo que se puede ver es neogótico y ahí se encuentra la reliquia de la Santa Sangre, que da su nombre a la basílica.

Horarios de visita: todos los días de 9:30AM a 12:30PM y de 2:00PM a 5:30PM
Precio:
2.50 euros

Iglesia de Nuestra Señora y escultura de Miguel Angel

En esta iglesia pudimos admirar una obra de Miguel Angel: la Madonna de Brujas. Pero además de esta obra, no podremos quedar indiferentes ante una muestra de como eran las tumbas en la antiguedad, estas se pintaban por dentro y es una costumbre muy interesante. Además vimos las tumbas de Carlos el Temerario y su hija Maria de Borgoña.

Te contamos aquí como fue la visita a la Iglesia de Nuestra Señora

Horarios de visita: de lunes a sábado de 9:30AM a 5:00PM
Precio:
iglesia gratis, pero para ver las tumbas y la escultura de Miguel Angel hay que pagar 6 euros


Otra actividad que realizamos durante nuestra estancia en Brujas, fue un Tour en el cual nos contaban sobre las diferentes leyendas que se ciernen sobre esta mágica ciudad. Contrata aquí el Free tour de los misterios y leyendas de Brujas (es gratis, sólo hay que dar la propina que consideres se ha ganado la persona que nos va guiando).


Museo de la Papa Frita

En este museo aprenderemos sobre la historia de la papa frita, originaria de Bélgica, sus salsas y como ha ido acompañando la cultura Belga a través de los tiempos. El edificio en el que se encuentra el museo, es además un lugar histórico, llamado el Saaihalle, que en el pasado fue la casa de una importante familia de genoveses, dedicados al comercio e instalados en Brujas.

En la ciudad, llegó a existir un barrio o una casa por cada país que tenía gente radicando allá para hacer negocios. Esta casa es un fiel testigo de aquellos tiempos de bonanza.

Te contamos como fue la visita al Museo de la Papa Frita acá

Horarios de visita: todos los días de 10:00AM a 5:00PM
Precio:
7 euros (compra tu boleto con anticipación aquí)

Museo Gruuthuse

Esta palacio fue el hogar de la familia Gruuthuse, la cual vivía justo al lado de la Iglesia de Nuestra Señora y contaba con su balcón privado para ir a misa sin salir de casa. En este museo, podremos recorrer las salas que nos muestran como era la vida en Brujas en el pasado, ese pasado lleno de bonanza comercial.

Horarios de visita: de martes a domingo de 9:30AM a 5:00PM
Precio:
12 euros

Al salir del Museo Gruuthuse, no hay que perderse el canal que esta justo al lado, podemos ver el simpático Puente Bonifacio en el cual prácticamente hay que hacer fila para tomarse la foto. Algo que llama la atención es que los barcos de tours por el canal logran pasar, sin importar que el espacio es muy pequeño.

Los cisnes de Brujas

En los diferentes parques de Brujas, como el Minnewaterpark, será casi imposible no encontrarse con los numerosos cisnes que deambulan por la ciudad. La mayoría de estas aves reciben cuidados y alimentación de la ciudad y esto ocurre desde hace siglos.

Todo empezó cuando Maximiliano I, archiduque de Austria quedó como gobernante, al morir su esposa, María de Borgoña. Esto no fue del agrado de los habitantes de Brujas. El descontento llegó a tal grado que Maximiliano fue secuestrado y encerrado en la casa Craenenburg, en la misma plaza mayor, como parte de sus tormentos, sus captores decapitaron ante sus ojos a Pieter Lanchals, su fiel amigo y administrador de la ciudad. Cuando Maximiliano recuperó su libertad mandó a ajusticiar a todos los cabecillas de las revueltas y como castigo a los habitantes de Brujas, les obligó a mantener bien alimentados y cuidados a numerosos cisnes que pasaron a ser unos de los protagonistas de los canales de Brujas. Escogió este animal ya que en neerlandés, lanchals significa “cuello largo” siendo, de hecho, un cisne el animal representado en el escudo de armas de la familia de Pieter Lanchals. Así, los brujenses recordarían para siempre cada que viesen un cisne el asesinato de Pieter.

Beaterio

Fundado en 1245, con fachadas blancas y un jardin relajante. El beaterio se convirtió en un refugio para las beguinas, mujeres laicas pero que buscaban refugio y estaban dispuestas a vivir una vida piadosa y de celibato.

Se puede visitar la museo “casa de beguina” y hacerse una idea de como era la rutina en el pasado. Hay que saber que aun viven mujeres en este lugar: las hermanas de la Orden de San Benedito y mujeres solteras de Brujas.

Nosotros solo visitamos el jardín, para el museo no nos alcanzó el tiempo (ya había cerrado). El jardín es un remanso de paz y las fachadas blancas transportan al pasado.

Horarios de visita: casa de beguina todos los días de 10:00AM a 5:00PM y el beaterio todos los días de 6:30AM a 6:30PM
Precio:
casa de beguina 2 euros y el beaterio gratis

Molinos de Kruisvest

Yendo hacía la zona de las antiguas murallas, cerca de la Puerta de la Santa Cruz, nos encontramos con varios molinos que forman parte de los numerosos molinos que se encontraban en la zona (algo como 21 al siglo 19). Uno de ellos se puede visitar por dentro, se trata del molino Sint-Janshuis, una visita rápida que vale mucho la pena, tanto por lo que aprenderemos como por las bonitas vistas de la ciudad.

Horarios de visita: de 9:30AM a 12:30PM y de 1:30PM a 5:00PM
Precio:
4 euros

Las casas de caridad

Se trata de pequeñas zonas residenciales, que datan del siglo XIV y la razón por la cual fueron construidas es la caridad. Pero no caridad desinteresada. De esta manera los pudientes podían asegurarse un camino “rápido” hacía el cielo, ¿cómo? cada zona residencial contaba con una capilla, aquí los beneficiarios de estas pequeñas casas debían orar para “agradecer” a su benefactor.

Hoy en día siguen siendo residencias y al visitarlas hay que permanecer en silencio, para evitar molestar a los vecinos.

Bruges Beer Experience

Cerveza y chocolate es algo inherente a Bélgica y en Brujas no podía faltar. En este museo interactivo, podremos aprender sobre el proceso de fabricación de la cerveza y como ha evolucionado con el paso del tiempo.

Al final de la visita, podremos degustar tres cervezas belgas (si es que compramos el boleto que incluye la degustación, que la recomiendo).

Horarios de visita: lunes a viernes de 10:00AM a 6:00PM, sábado 10:00AM a 9:00PM y el domingo de 10:00AM a 5:00PM
Precio:
16 euros con degustación y 10 euros sin degustación

Brujas, una ciudad que vale la pena

Brujas es una ciudad que no nos dejó indiferentes, en donde hay mucho que ver ya que cada rincón nos traía alguna historia y donde el tiempo parece haberse detenido.

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Olga Grijalva

Soy una viajera y creadora de contenido de viajes con 18 años de experiencia. Mi objetivo es compartir información útil para ayudarte a planear tus aventuras. He visitado más de 40 países y estoy emocionada por compartir mi experiencia contigo.