Visita a la Torre redonda de Copenhague. Edificio creado para ser observatorio. Hoy en dia ofrece bellas vistas a la ciudad.
Relato de la visita a la Torre Redonda de Copenhague (Rundertaarn), en esta torre hay que tener buena condición física ya que se sube dándole vueltas. Ya verán.
Nuestra visita a la Rundertaarn
¿Cuanto cuesta la entrada? 25 DKK (aproximadamente 3.5 euros)
En el camino nos encontramos con un kiosco que vendía snacks, algo sencillo, pero el kiosco en si era muy llamativo (luego nos daríamos cuenta que había muchos como este por toda la ciudad). Recorríamos las calles danesas y conforme nos íbamos acercando a la torre era imposible no verla. Al entrar lo primero que se ve es el interior de la iglesia que esta justo al lado de la torre (había una banda tocando).
Esta torre fue construida por uno de reyes con nombre Cristian (el IV para ser mas exactos) y su uso era: observatorio astronómico.
Subiendo la Torre redonda de Copnehague
La torre tiene siete vueltas en total, y no queda nada mas que caminar por la espiral vueltas y vueltas hasta llegar a la cima :D. Por eso decía lo de la condición física XD
Y aqui se ven los retretes que se utilizaban hace algunos ayeres. De hecho contaron una historia de que por mucho tiempo la torre olía mal porque el deposito del retrete estaba lleno y tuvieron que dar varias vueltas con camiones para limpiarlo. Ya no digo mas XD
La cima de la Torre Redonda
Y al llegar a la cima, la recompensa. Un bello paisaje de Copenhague.
Y después de admirar el paisaje por un buen rato llegó el momento de bajar 😀 era menos doloroso
Arte con popotes
En una de las salas de la torre había una exposición de arte moderno. Lo que mas me llamo la atencion fueron unos maniquís vestidos con popotes 😮 . Luego en otra sala vendían souvenirs, pero me dolió ver que todos los imanes eran Made in China. Ni modo.
Pasteles en Copenhague
Y al salir de la torre nos sorprendió la lluvia (que llegan y se van rápidamente, pero hay que tener siempre listo el paraguas). Así que nos refugiamos en una cafetería donde yo me tomé un capuccino y Vicente un chocolate caliente. Ademas pedimos un pastelito 😀 . Dato curioso: ahí fue donde observe por primera vez que en las mesas que dan al exterior de las cafeterías acostumbran poner mantitas para que la gente se puede sentar afuera y protegerse del frío. Algo nuevo para mi.
Relatos de otros viajeros sobre La Torre Redonda de Copenhague #postamigo
Lilián Viajera – La Torre Redonda está en Copenhague
Me encanta Copenhague, pero no tuve la oportunidad de visitar la Torre Redonda. Bonito post. ¡Buen día!
Bueno, sera un pretexto para regresar 😀
Madre mía menudo chocolatero!!! Me apunto la combinación torre+chocolate para cuando visite Kobenaghen! 😀
Un saludo!
Después de la subidita ese chocolate nos cayo rebien hehehe
No he estado en Copenhague, pero no dudo que iré más pronto que tarde. Tomo nota de tu recomendación de subida a la Torre y de los buenos pasteles que hay por allí.
Oh tienes que ir, Copenhague te gustara!!
Supongo que después de subir a la torre redonda, se siente menos remordimiento cuando te comes esos postres tan ricos 🙂
hehehe exacto ^^
Hola!, qué subidita, hace un par de días subí al Blarney Castle de Irlanda y lo mismo…. hermosas torres solo ante buena condición física, ya sé que tengo que ir al gym antes de visitar Dinamarca!
Con tantas bicicletas que hay en la ciudad te daran ganas de hacer deporte seguro, asi que ya estaras preparada para subirte a la torre 😀
¡Pero bueno! Yo no vi esos kioscos tan curiosos 🙁
Me gustó mucho la torre y la calle que lleva hasta ella. Confieso: yo también compré chocolates….
Tu post me ha hecho revivir mi viaje Olga, gracias!
Oh en serio no los viste? que raro… nosotros cada rato nos los topabamos :/ a lo mejor este a~o les cambiaron algo, no se…
Hehehe los chocolates es que dan muchas ganas es inevitable caer hehehe
Saluditos!